Logo
Vida y Sociedad

Raíces

Vida y Sociedad

Publicado el 27/06/2025 a las 16:00 por Carina Ernst

Imagen del artículo

Raíces

Mis recuerdos dominantes de mi padre son madrugadas frías y noches gélidas, porque en zafra (y a veces en temporadas más calmas), siempre fue el primero en levantarse y el último en acostarse. De mañana, primero prende la estufa, después calienta el agua para el mate, y desde su juventud sale antes de que asome el alba. Nunca le escuché quejarse por madrugar, solo porque otros no lo hacían. Ni siquiera se quejaba por el trabajo, solo porque pocos siguen el paso y casi nadie “aguanta el trote”.

En sus silencios tuve que aprender a leerlo, ya que no es de muchas palabras. Aprendí que cuando la zafra es buena, o cuando embarca ganado “de primera”, sus ojos brillan un poco más azules, felices de ver el fruto de su esfuerzo. Cuando estuvo en actividad con la maquinaria de la chacra parece que su alma se vuelve la de un niño nuevamente, como si le hubieran regalado un juguete que deseaba hace mucho tiempo. Cuando nada sale como se planificó suele espejar chispas por esas cuencas, como una retenida tormenta que se calma lentamente. Y cuando la seca comienza a aparecer hay una nube que opaca esa mirada usualmente seria, la creciente sombra de preocupación cuando los campos lentamente se tiñen de amarillo, cuando las noticias de los incendios se propagan con igual velocidad o cuando los rumores desfavorables a los productores están en boca de todos.

Suele hablar con nostalgia de su pasado, no porque lo extrañe o quiera volver, sino porque ve una sociedad más contaminada que antaño, más decadente y, según él, “llena de vagos”. Y un poco tiene razón. Y aunque suele estar en el campo todo el día encontró la forma de inculcarme valores en su distancia; la familia primero y más importante; el trabajo, segundo; y tercero el respeto al trabajo de otro. Paciencia, porque el productor debe tener mucha. Visión a largo plazo y reducción del riesgo, porque ser productor es, por naturaleza, un riesgo sostenido en el tiempo. Sin control sobre factores climáticos y externos, hay que ingeniárselas para adaptarse a lo que llega... y también, a lo que no llega. La construcción silenciosa del capital, fruto de esfuerzo sostenido y trabajo incansable. Y el trato justo en la vida y en los negocios, con límites y respeto.

A través de los ojos de mi padre aprendí a leer el campo, un lugar abandonado por la mayoría, ignorado por quienes crecieron entre paredes, glorificado por quienes pasan un fin de semana creyéndose productores, y profundamente amado por quienes dedican su vida a trabajar la tierra. El productor suele tener una piel gruesa y resistente, como una armadura contra el sofocante sol del verano y el cruel frío invernal. Y en los usuales silencios de la gente de campo se suele reflejar la frustración que se tiene ante las opiniones de ignorantes que, sin conocer, hablan sobre uno de los trabajos más desgastantes que puede haber.

A veces suelo reflejar esa misma frustración, mirando con cierto desdén a quien comenta que el campo da ganancias fáciles, seguras o ciertas. Ojalá pasaran un día de verano allí, o una temporada zafral. Quizá entonces quienes demonizan las grandes fortunas entenderían el trabajo que hay detrás, y las pocas horas de sueño de las que se puede gozar. No se puede culpar a la gente por su ignorancia, ni obligar a entender a quien no quiere. Pero quizás, con el tiempo y con las consecuencias que se acarreen, lleguen a comprender una realidad latente: en el campo no solo se cultiva la tierra: se cultivan valores y convicciones que no se enseñan en las aulas ni se compran con dinero. Y quienes lo trabajan no buscan gloria ni aplausos, pero merecen el digno respeto y trato.

Foto de Carina Ernst

Carina Ernst

Estudiante de todo lo que inquiete; me gusta darle voz a lo que se ignora, se calla o se da por sabido. Actualmente estudio Contabilidad y Economía en UdelaR.

Más sobre el autor

Te puede interesar

¿Qué te pareció este artículo?

Compartí este artículo

Comentarios

Agustín Araujo

27/06/2025 17:53

Muy bueno

Walter.

27/06/2025 20:01

Bien

Dejá tu comentario

Gracias por apoyarnos💚

Gracias por apoyarnos💚