Ese día supe que te ibas a ir
Publicado el 11/06/2025 a las 19:30 por Emilia Tejera

Siempre supe que había algo más allá de lo físico, siempre soñé con un mundo mágico, con hadas, ángeles y duendes… porque vos me enseñaste así. Salir en bici por el barrio, acompañarte a hacer los mandados, mostrarte mis creaciones tan inocentes, que siempre recibían tus mas fuertes aplausos y halagos. Vos siempre hacías que todo se sienta mágico.
Contigo aprendí a escuchar, pero nunca a hablar. Y es por eso que hoy, a mis 21 años, te hablo. Aunque no se si me estas escuchando, seguramente si. En esas hermosas tardes que pasé contigo, memoricé cada parte de ti. Tu altura, tu pelo y hasta como se sentía cuando, con la barba sin afeitar, me pinchabas en chiste la mejilla.
Recuerdo tu olor y tu voz, y a veces los siento en mi casa. Aunque ya no sea la misma casa, Aunque ya no sea la misma yo.
Un día me subí al auto, y me llevaste a un lugar muy lindo, donde me hicieron jugar y dibujar, muchas veces y cada sábado, a una niña bajo la lluvia. Luego a la misma niña con su familia. No entendía por que. No entendía nada. Ahí empezó todo lo que vino después.
Bajo mis ojos eras el mismo, pero un poco mas flaco, un poco mas apagado. Quizá estabas cansado, trabajabas mucho, casi siempre estabas estresado.
Estabas menos en casa, y todo se tiñó de blanco y gris.
Una tarde templada de noviembre, llegaba de la escuela directo a abrazarte. En mi mundo ya casi no quedaban haditas, ni duendes, ni ángeles. Ese día supe que te ibas a ir. Así que me senté a tu lado y te vi partir. Éramos solo yo y vos… posiblemente mis seres mágicos estaban descansando en un sueño profundo del que no sabía si iban a despertar… aunque me di cuenta que vos te habías convertido en uno.
Desde esa noche, conocí una nueva forma de sentirte. Y aunque mi mundo fantástico no volvió a despertar en muchos años, te veía, y te veo en todo lo que hago. Hoy, en el mes de tu cumpleaños, te sigo celebrando y cada vez que te sueño, te siento más cerca. Yo se que sabes. Yo se que estás. Siempre estás.
[Esto es una historia basada en mi infancia, así es exactamente como lo sentí y como lo siento actualmente. Sigo creyendo en un mundo mágico en secreto, temo que piensen que estoy loca, aunque me tranquiliza saber que hay alguien entre las nubes que sigue creyendo en mí]
Gracias por leer.